viernes, 4 de diciembre de 2015

GELATI (HELADOS ITALIANOS)




El término gelato, que deriva del latín gelatus (“congelado”), define a un producto artesanal propio de la gastronomía italiana, diferente a los helados comunes de otros países. El gelato es único en el mundo, pues posee unas características propias con unas recetas tradicionales que han pasado de generación en generación.

Los orígenes del helado se remontan hasta la Antigüedad Clásica, una época en la que los distintos pueblos comenzaron a conservar productos como la leche y la fruta en hielo. Los romanos consiguieron desarrollar técnicas avanzadas de conservación de alimentos, y así popularizaron una mezcla refrescante de hielo, azúcar o miel y zumos que guardaban bajo tierra.

Siglos más tarde, las ciudades italianas vivieron su máximo esplendor durante el Renacimiento, y fue en aquella época cuando los grandes nobles se aficionaron a un nuevo producto creado a base de leche, nata y huevos: había nacido el auténtico gelato. Desde las pastelerías de Florencia el helado viajó a la corte francesa, donde se hizo muy popular y pronto se convirtió en objeto de deseo para toda la sociedad europea.


Para los italianos, el gelato es todo un símbolo de su cultura. Las mejores recetas pasan de padres a hijos, adaptándose a los nuevos tiempos pero manteniendo siempre la esencia artesanal de su elaboración y la máxima calidad de sus ingredientes.


RECETA BÁSICA PARA HELADOS 

4Yemas de huevo
100gr de azúcar 
1/2 litro de leche o nata

Batir la yemas de los huevos con la azúcar hasta conseguir una crema espumosa. verterla en un cazo y calentar  a fuego lento con cuidado y removiendo constantemente.
Añadir poco a poco leche sin dejar de revolver. Dejar enfriar; remover de vez en cuando.
Introducir la crema en la maquina de helados o en el congelador y esperar a que se congele. batir al gusto con una crema o mousse aromatizante.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario